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Él y su vida perfecta: su novia, su gente. Ella y su vida de problemas y sonrisas fingidas.
Él vivía feliz. Ella luchaba por levantarse cada día y no echarse a llorar.
Él lo tenía todo. Ella se conformaba con lo poco que había conseguido.
Pero un día ella descubrió que él también fingía las sonrisas, que no todo era perfecto. Ella luchó por hacerle sonreír todos los días y cometió el peor error de su vida.
Ella volvía a casa esperando un mensaje suyo, mientras que para él ella era una más. Él ya tenía otra que la hacía sonreír en sus malos días. Ella lo sabía y aun así cometió el error.
Ella sufría mientras él no se daba cuenta.
Ella no quería arriesgar, sabía que iba a fracasar y otro fracaso la hundiría para siempre.
Él sonreía por las noches mientras ella luchaba por contener las lágrimas.
Cuando se veían ella volvía a fingir mientras él creía que todo iba bien.
Ella intentaba olvidar, mientras él quería vivir su presente.
Ella quería dejarse llevar de una vez, pero miles de sentimientos se debatían en su interior. Él simplemente continuaba con su vida sin pararse a pensar.
Ella entendió que le quería y no podía hacer nada para evitarlo. Él a ella no....